Época: ReligiosidadPlenitud
Inicio: Año 1000
Fin: Año 1300

Antecedente:
Religiosidad en la Plenitud Medieval
Siguientes:
Las últimas herejías eruditas
Herejías comunales
Herejías mesiánico-milenaristas
Herejías antijerárquicas
Herejías en favor de la pobreza
Herejías dualistas. El catarismo
La reacción eclesiática



Comentario

Se ha dicho, con razón, que casi todos los movimientos espirituales de cierta envergadura de la Plena Edad Medía terminaron plasmándose, bien en una orden religiosa, bien en una herejía (Grudmann). En realidad esto es así, porque los puntos de vista tanto ortodoxo como heterodoxo partían siempre de idéntico presupuesto: el ansia de retorno al mundo ideal de la primitiva Iglesia. El acuciante deseo de reforma a todos los niveles observable en amplias capas de la población, y más en concreto el elevado dinamizador que representa entre las élites el modelo de vida y pobreza evangélicas, explican sin duda el extraordinario auge religioso vivido por Occidente durante los siglos XI al XIII. Mas estas mismas condiciones favorables lo eran también para el desarrollo de la herejía, que alcanzó durante esta época, y por vez primera desde la Antigüedad tardía, dimensiones tales que llegaron a poner en tela de juicio la viabilidad misma de la renovación católica.