Época: Bliztkrieg
Inicio: Año 1940
Fin: Año 1940

Antecedente:
La invasion de Francia

(C) Andrés Ciudad y María Josefa Iglesias



Comentario

Tras la tormentosa reunión del gobierno francés el día 16 y la visita de Winston Churchill esa misma fecha, el gobierno francés tuvo que reorganizarse. Reynaud llamó a la vieja guardia, a los vencedores de la Gran Guerra, a salvar la situación: Pétain, 84 años, embajador en Madrid y Weygand, 73 años, que estaba en Siria como jefe militar del Próximo Oriente, fueron urgentemente llamados a París. El día 18 Weygand fue nombrado comandante en jefe de lo que quedaba del Ejército de Francía y Pétain, primer ministro delegado.
Mientras se efectuaban esos relevos, caían sobre París nuevas desgracias. El día 18, por la tarde, el general Giraud, comandante en jefe de lo que quedaba del IX Ejército, fue sorprendido por los veloces avances de Rommel y Guderian y debió retirarse apresuradamente. Con un pequeño grupo de gentes de su Estado Mayor y algunos soldados que se les unen, tratan de cruzar las líneas alemanas, pero son apresados en Le Catelet a las seis de la mañana del día 19. Ese mismo día, los alemanes se acercaban al Canal de la Mancha, como hemos visto, mientras que el VII Ejército francés, que debería ya haber retrocedido hasta el Somme, no podía alcanzar sus posiciones a causa del continuo ataque de los Stuka, que dificultaban su repliegue.

El 20 de mayo llegó de inspección al frente el general Weygand. Quedó muy deprimido por la situación, pero dispuso inmediatamente una reunión en Yprés con el rey Leopoldo III de Bélgica, el general Billotte y Lord Gort. La reunión se celebró a medio día, sin que pudiera llegar el general británico. Weygand proponía una inmediata retirada belga hasta el río Yser, mientras que Billotte con los ejércitos VII y I y Gort con su BEF caían sobre la cuña alemana entre Arrás y el Somme. Los belgas dudaban en aceptar tal retirada sin combatir y pospusieron su respuesta.

Weygand regresó rápidamente a París, donde el 22 de mayo el propio Churchill y sus asesores aprobaron el plan. Los belgas también aceptaron: el ataque aliado sobre la cuña alemana, que había alcanzado el Canal al anochecer del día 20, debería comenzar inmediatamente: el día 23 de mayo. Pero nunca se produjo tal acción. Ocurrió que el día 20, tras la conferencia de Yprés, el general Billotte murió en un accidente de automóvil y su sucesor, Blanchard, desconocía lo acordado y, desmoralizado por doce días de derrotas consecutivas, tampoco se tomó muchas molestias en saber qué había ocurrido en Yprés. El jefe británico, Gort, no había estado en la conferencia y tuvo las primeras noticias sobre lo tratado en ella el día 22..., cuando se hallaba comprometido en fuertes combates defensivos.

La ocasión se había perdido. El día 24, los alemanes ya dominaban un amplio espacio de la costa del Canal, tomaban Boulogne, cercaban Calais y se hallaban a menos de 20 kilómetros de Dunkerque.