Época: Tierra Santa
Inicio: Año 1066
Fin: Año 1150


(C) Isidro G. Bango Torviso



Comentario

La entrada de los cruzados en Jerusalén, en 1099, supuso el nacimiento de unos estados cristianos en Tierra Santa. El dominio cruzado se prolongaría hasta 1291, año de la reconquista árabe. La nueva situación política favoreció la difusión de las formas artísticas de Occidente, de esta manera el arte tardorrománico del Sur de Francia e Italia tuvo su expansión en estos territorios. Los artistas venidos del Occidente europeo no sólo introdujeron su arte sino que, en muchas ocasiones, asimilaron las tradiciones locales creando formas de un exotismo híbrido, que han dado lugar a obras de una extraordinaria belleza.
Con el arte que los cruzados realizaron en Jerusalén se relacionan una serie de libros ilustrados con un estilo sincrético de la miniatura occidental y las realizaciones de la pintura de los Comnenos. Obras como el "Sacramentario" y el "Misal del Santo Sepulcro" son una bella muestra de esta simbiosis pictórica.

La empresa constructiva más importante que se impusieron los gobernantes cristianos fue la reconstrucción del Santo Sepulcro de Jerusalén. La obra que había levantado Constantino había sido destruida en gran parte, los cruzados realizaron una remodelación del conjunto adoptando una forma de gran iglesia con crucero dotado de tribunas y girola de tres absidiolos. Se aprecia claramente que esta forma estaba relacionada con las grandes basílicas del románico pleno, relación que se confirma en los más mínimos detalles de su léxico ornamental. Todas estas obras fueron inauguradas en parte el 15 de julio de 1149, año en que se conmemoraba el cincuenta aniversario de la entrada de los cristianos en Jerusalén.

Un grupo homogéneo de templos sigue modelos románicos totalmente trasplantados a estas tierras orientales. La iglesia de Santa Ana de Jerusalén es el mejor exponente de esta arquitectura cruzada. Su forma se adapta a la planta basilical, de tres naves, con transepto no acusado sobre las colaterales, y tres ábsides semicirculares al interior y paños rectos por fuera. En el centro del crucero se erigió una cúpula ovoide, mientras que los tramos de las naves se cubren con aristas. Cuando contemplamos esta obra nos parece que estamos ante un templo románico borgoñón. Siguiendo la forma basilical, con la nave central cubierta con una bóveda de cañón apuntado sobre fajones, se construye en el norte del país una serie de iglesias como las de Giblet, Tortosa y San Phokas de Amyun.

Los escultores decoraron alguno de estos templos con un arte antiquitizante similar al que se extendía por tierras de Provenza e Italia. Se denomina taller de la explanada del templo a un grupo de escultores que trabajaron en este área en torno a 1170-1180. Sus obras de hermosas y estilizadas formas parecen marcadas por el arte antiguo aún más que sus modelos franceses. Podemos rastrear su actividad en los relieves de la fachada del transepto del Santo Sepulcro, en la tumba de Balduino V (1185-1186), en la decoración de la iglesia de Santa Ana y en la de la Virgen en el valle de Josafat.

El grupo escultórico más importante corresponde al conjunto de cinco capiteles pertenecientes a la catedral de la Anunciación de Nazareth. Representan temas apostólicos. Como ha indicado P. Deschamps, su arte se relaciona con un capitel de Plaimpied (Berry). Su cronología, hacia 1180, está de acuerdo con la del taller de la explanada del templo.

La misión bélica de los cruzados exigía la realización de una importante arquitectura militar. Las fortalezas asumían la tradición bizantina y la experiencia occidental. El Krak de los Caballeros (Siria) es una fortificación de frontera ocupada por los cruzados entre 1110 y 1271. Una forma general trapezoidal, agrandada con encintados paralelos en sucesivas etapas, tenía en su interior un patio central rodeado de dependencias abovedadas.