Comentario
La capital mexica, cuyo centro se encuentra hoy día cubierto por las principales dependencias políticas, administrativas y religiosas de la Colonia, se planificó en torno a una inmensa plaza que contenía 78 edificios de naturaleza pública. Este recinto se delimitó por un Coatepantli, y tenía cuatro puertas de acceso situadas a los cuatro puntos cardinales. De cada una de ellas partían tres inmensas calzadas sobre el nivel del agua que unían la isla con la tierra firme y que tenían un gran valor simbólico y estratégico: la de Ixtapalapa procedía del sur, y una bifurcación empalmaba con Coyoacan; la de Tabuca venía del oeste; y la de Tepeyac conectaba con el norte. Tenochtitlan era, así, el centro del Imperio mexica y, por consiguiente, el centro del mundo.En el interior de la Gran Plaza se construyó el complejo del Templo Mayor, que incluía los templos gemelos dedicados a Tlaloc y Huitzilopochtli colocados sobre un mismo edificio piramidal, dualidad que estaba ya expresada en la Gran Pirámide de Tenayuca construida a lo largo del siglo XIII.Los templos dedicados a Quetzalcoatl-Ehecatl, Tezcatlipoca y Xipe Totec, el juego de la pelota, y una sucesión de estructuras dedicadas a salas de guerreros y órdenes militares, altares, tzompantlis, el calmecac -en realidad un conjunto de palacios y templos que fueron en parte utilizados con funciones administrativas-, salas de iniciación y baños y otras estructuras menores, conforman esos 78 edificios que se instalan en la Gran Plaza.Fuera del coatepantli, la ciudad quedó organizada siguiendo un rígido patrón de parrilla impuesto por el sistema de calzadas. En él se emplazaban los suntuosos palacios de la nobleza, edificios de carácter público, administrativo y de culto organizados en torno a plazas y espacios abiertos atravesados por canales de abastecimiento que enlazaban plazas de mercado. En el exterior, los conjuntos residenciales de artesanos y campesinos organizados en barrios, completaban la jerarquización urbana de la ciudad, que llegó a tener cerca de 300.000 habitantes.Las construcciones se levantaron sobre una base de tierra, cascotes y restos de antiguos edificios, y fueron revestidas con bloques de piedra volcánica -tezontle- enlucidos con estuco, para ser decoradas más tarde con relieves y murales. Además de las edificaciones públicas y residenciales, los mexica realizaron grandes obras de ingeniería para sortear la dificultad de su emplazamiento isleño, como lo manifiestan las calzadas, los canales, puentes y trabajos de control de agua, siendo un ejemplo excelente el Acueducto de Chapultepec que aprovisionó de agua potable a la ciudad.En la Plaza Central, la arqueología se ha interesado por el Templo Mayor, un impresionante complejo que fue construido a lo largo de 200 años y que, en realidad, constituye una síntesis de la historia mexica. Levantado según un patrón claramente mesoamericano de superposiciones de basamentos y templos hasta un total de siete etapas, se terminó en 1487 y en su interior albergaba una ingente cantidad y variedad de ofrendas que identifican con claridad la expansión del Imperio mexica en Mesoamérica y que, en este sentido, sintetizan el arte mobiliar de esta zona de civilización durante el Postclásico Tardío.Los sitios de Calixtlahuaca, Tenayuca, Texcocingo, Teotenango, Malinalco y Cholula, documentan también la arquitectura mexica, incluyendo grandes plataformas coronadas por templos gemelos, templos circulares dedicados al dios del viento, tzompantlis, altares de cráneos y otras estructuras características de la arquitectura de finales de la etapa prehispánica.