Comentario
(tomado de los escritos de Fred Majdalany)"Los soldados que combatieron en las montañas poco a poco comenzaron a comprender que la posición clave no era la ciudad de Cassino, sino la montaña del monasterio, la cual controlaba dos valles y se encontraba protegida al norte por un barranco, al oeste de las cotas 593 y 595. (Estas colinas se conocían sólo con números, y sin embargo, aquellos números se hicieron más familiares que los verdaderos nombres)". Los mensajes provenientes de este frente repetían siempre el mismo estribillo: "El centro de la resistencia es Montecassino". Día a día, noche tras noche, los americanos, agazapados penosamente en aquellas pendientes, trataron de avanzar palmo a palmo. "Las pendientes estaban llenas de cadáveres que no se podían transportar durante el día y ni siquiera enterrar. Los pelotones se habían reducido a escuálidos grupos entorpecidos por el frío, el cansancio y la intemperie, aunque obstinadamente agazapados en sus posiciones".