Época: India
Inicio: Año 1500
Fin: Año 2003

Siguientes:
La religión védica
El panteón hinduista
Los Vedas
La sílaba sagrada om
El tantra en el hinduismo
Los gurus
Los ríos sagrados
La vaca sagrada



Comentario

La religión mayoritaria del la India, el hinduismo, es un término acuñado en el siglo XIX para describir al conjunto de principios religiosos más antiguo en el mundo de las supervivientes hasta la actualidad. Su origen está en la fusión de las creencias autóctonas o dravídicas con las aportadas por los arios hacia el 1500 a.C. La forma más primitiva de hinduismo es el vedismo (1500-800/600 a.C.), que tiene su origen en los Vedas, los cuatro libros de la sabiduría. La sociedad que deriva de esta creencia da lugar a una jerarquización en castas (varna) y bajo el gobierno de los sacerdotes o brahmanes. Con el paso del tiempo esta creencia evolucionará hacia el brahmanismo (800/600-260 a.C.) y, tras un breve paréntesis de auge del budismo, renacer de nuevo hacia finales del siglo V como un nuevo brahmanismo que dará lugar en el siglo VII a la devoción bhakti.
Para los indios, este conjunto de creencias es denominado Sanatadharma, es decir, ley eterna, y se fundamenta en los textos védicos y en numerosos comentarios e interpretaciones de éstos, como las Brahmanas y las Upanishad, así como el Mahabharata y el Ramayana, las dos grandes epopeyas indias. Si bien no se trata de una religión unitaria, existen tres rasgos que son comunes a todas sus formas de expresión. El primero es la consideración de la realidad como una apariencia ilusoria o maya; el segundo, la creencia en la reencarnación o samsara y en la ley de purificación o karma, según la cual cada acto individual provoca un efecto en las vidas futuras del sujeto y en todo el cosmos; el tercer rasgo es la aspiración a la liberación de las ataduras materiales y al ser individual para identificarse con el Ser Universal (Brahman).

La potencia del Ser Universal se manifiesta a través de su naturaleza múltiple, creando un complejo panteón de dioses. Muchos de éstos son de origen ario y de carácter básicamente masculino, representantes de las fuerzas de la naturaleza: Indra (lluvia), Varuna (rayo), Surya (Sol), Cahndra (Luna), etc. A partir del siglo V comienzan a integrarse nuevas divinidades, que se agrupan en torno a una tríada divina (Brahma, Visnú y Siva) de dioses de la creación, la preservación y la destrucción, con múltiples formas y aspectos, tanto masculinos como femeninos.