Época:
Inicio: Año 1 A. C.
Fin: Año 1 D.C.

Antecedente:
LA CRONICA DEL PERU



Comentario

De la descripción de la provincia de Popayán, y la causa por que los indios della son tan indómitos y los del P u son tan domésticos


Porque los capitanes del Perú poblaron y descubrieron esta provincia de Popayán, la porné con la misma tierra del Perú, haciéndola toda una; mas no la apropiaré a ella, porque es muy diferente la gente, la disposición de la tierra y todo lo demás della; por lo cual será necesario que desde el Quito (que es donde verdaderamente comienza lo que llamamos Perú) ponga la traza de todo y el sitio della; y desde Pasto, que es también donde por aquella parte comienza esta provincia, y se acaban en Antiocha. Digo, pues, que esta provincia se llamó de Popayán por causa de la ciudad de Popayán, que en ella está poblada. Tendrá de longitud docientas leguas, poco más o menos, y de latitud treinta y cuarenta, y a partes más y a cabos menos. Por la una parte tiene la costa de la mar del Sur y unas montañas altísimas muy ásperas, que van de luego della al oriente. Por la otra parte corre la larga cordillera de los Andes, y de entrambas cordilleras nascen muchos ríos, y algunos muy grandes, de los cuales se hacen anchos valles; por el uno dellos, que es el mayor de todas estas partes del Perú, corre el gran río de Santa Marta. Inclúyese en esta gobernación la villa de Pasto, la ciudad de Popayán, la villa de Timamá, que está pasada la cordillera de los Andes, la ciudad de Cali, que está cerca del puerto de la Buena ventura, la villa de Ancerma, la ciudad de Cartago, la villa de Arma, ciudad de Antiocha, y otras que se habrán poblado después que yo salí della. En esta provincia hay unos pueblos fríos y otros calientes, unos sitios sanos y otros enfermos, en una parte llueve mucho y en otra poco, en un tierra comen los indios carne humana y en otras no la comen. Por una parte tiene por vecino al nuevo reino de Granada, que está pasados los montes de los Andes; por otra parte, al reino del Perú, que comienza del largo della al oriente. Al poniente confina con la gobernación del río San Juan; al norte con la de Cartagena. Muchos se espantan cómo estos indios, teniendo muchos dellos sus pueblos en partes dispuestas para conquistarlos, y que en toda la gobernanación (dejando la villa de Pasto) no hace frío demasiado ni calor, ni deja de haber otras cosas convenientes para la conquista, cómo han salido tan indómitos y porfiados; y las del Perú, estando sus valles entre montañas y sierras de nieve y muchos riscos y ríos, y más gentes en número que los de acá, y grandes despoblados, cómo sirven y han sido y son tan subjetos y domables. A lo cual diré que todos los indios subjetos a la gobernación de Popayán han sido siempre, y lo son, behetrías. No hubo entre ellos señores que se hiciesen temer. Son flojos, perezosos, y sobre todo aborrescen el servir y estar subjetos, que es causa bastante para que recelasen de estar debajo de gente extraña y en su servicio. Mas esto no fuera parte para que ellos salieran con su intención; porque, constreñidos de necesidad, hicieran lo que otros hacen. Mas hay otra causa muy mayor, la cual es que todas estas provincias y regiones son muy fértiles, y a una parte y a otra hay grandes espesuras de montañas, de cañaverales y de otras malezas. Y como los españoles los aprietan, queman las casas en que moran, que son de madera y paja, y vanse una legua de allí o dos o lo que quieren, y en tres o cuatro días hacen una casa, y en otros tantos siembran la cantidad de maíz que quieren, y 10 cogen dentro de cuatro meses. Y si allí también los van a buscar, dejado aquel sitio van adelante o vuelven atrás, y a donde quiera que van o están hallan qué comer y tierra fértil y aparejada y dispuesta para darles fruto; y por esto sirven cuando quieren y es en su mano la guerra o la paz, y nunca les falta de comer. Los del Perú sirven bien y son domables porque tienen más razón que éstos y porque todos fueron subjetos por los reyes ingas, a los cuales dieron tributo, sirviéndoles siempre, y con aquella condición nascían; y si no lo querían hacer, la necesidad los constreñía a ello, porque la tierra del Perú toda es despoblada, llena de montañas y sierras y campos nevados. Y si se salían de sus pueblos y valles a estos desiertos no podían vivir, ni la tierra da fructo ni hay otro lugar que lo dé que los mismos valles y provincias suyas; de manera que por no morir, sin ninguno poder vivir, han de servir y no desamparar sus tierras, que es bastante causa y buena razón para declarar la duda susodicha. Pues pasando adelante, quiero dar noticia particularmente de las provincias desta gobernación y de las ciudades de españoles que en ella están pobladas, y quién fueron los fundadores. Digo, pues, que desta ciudad de Antiocha tenemos dos caminos: uno para ir a la villa de Ancerma, otro para ir a la ciudad de Cartago; y antes que diga lo que se contiene en el que va a Cartago y Arma diré lo tocante a la villa de Ancerma, y luego volveré a hacer lo mismo destotro.