Época:
Inicio: Año 1 A. C.
Fin: Año 1 D.C.

Antecedente:
EL SEÑORIO DE LOS INCAS



Comentario

De cómo reinó en el Cuzco Guayna Capac que fue el dozeno rey Inca.


Muerto que fue el gran rey Tupac Inca Yupanqui, se entendió en hacer sus obsequias y entierro al uso de sus mayores, con gran pompa. Y cuentan los orejones que de secreto tramaban entre algunos de cobrar la libertad pasada y eximir de sí el mando de los Incas y que de hecho salieran con lo que intentaban si no fuera por la buena maña que se dieron los gobernadores del Inca con la gente de los mitimaes y capitanes, que pudieron sustentar en tiempo tan revuelto y que no tenía rey lo quel pasado les había encargado. Guayna Capac no descuidó ni dejó de conocer que le convenía mostrar valor para no perder lo que su padre con tanto trabajo ganó. Luego se entró a hacer el ayuno y el que gobernaba la ciudad le fue fiel y leal. No dejó de haber alguna turbación entre los mesmos incas, porque algunos hijos de Tupac Inca, habidos en otras mujeres que la Coya, quisieron ponerse a pretender la dignidad real, mas el pueblo, que vían estaba con Guayna Capac, no lo consintió, mas estorbó el castigo que se hizo. Acabado el ayuno, Guayna salió con la borla muy galano y aderezado y hizo las cirimonias usadas por sus pasados, con el fin de las cuales el nombre de rey le pusieron; y así, a grandes voces decían Guayna Capac Zapalla tucuillacta uya; que quiere decir "Guayna Capac sólo es rey; a él oyan todos los pueblos".

Era Guayna Capac, según dicen muchos indios que le vieron y conocieron, de no muy grand cuerpo, pero doblado y bien hecho; de buen rostro y muy grave; de pocas palabras, de muchos hechos; era justiciero y castigaba sin templanza. Quería ser tan temido que de noche le soñaran los indios. Comía como ellos usan y así vivía vicioso de mujeres, si así se le puede decir; oía a los que le hablaban bien y creíase muy de ligero; privaron con él mucho los aduladores y lisonjeros, que entre ellos no faltaban ni hoy deja de haber, y daba oídos a mentiras, que fue causa que muchos murieron sin culpa. A los mancebos que tentados de la carne dormían con sus mujeres o mancebas o con las que estaban en el templo de sol, luego los mandaba matar a ellos y a ellas castigó igual. A los que él castigó por alborotos y motines privó de las haciendas dándolas a otros; por otras causas, era el castigo en las personas solamente. Mucho desto disimulaba su padre, especial lo de las mujeres, que cuando se tomaba alguno con ellas decía que eran mancebos. Su madre de Guayna Capac, señora principal, mujer y hermana que fue de Tupac Inca Yupanqui, llamada Mama Ocllo, dicen que fue de mucha prudencia y que avisó a su hijo de muchas cosas que ella vio hacer a Tupac Inca, y que le quería tanto que le rogó no se fuese a Quito ni a Chile hasta que ella fuese muerta; y así, cuentan que por le hacer placer y obedecer a su mandado estuvo en el Cuzco sin salir hasta que ella murió y fue enterrada con gran pompa, metiéndose en su sepultura muchos tesoros y ropa fina y de sus mujeres y servidores. Los más tesoros de los Incas muertos y heredades, que llaman chácaras, todo estaba entero desde el primero, sin que ninguno osase gastarlo ni tocarlo, porque entre ellos no tenían guerras ni necesidades que el dinero hobiese de las remediar; por donde creemos que hay grandes tesoros en las entrañas de la tierra perdidos; y así estarán para siempre si de ventura alguno, edificando o haciendo otra cosa, no topare con algo de lo mucho que hay.