Época: Arnhem/Ardenas
Inicio: Año 1939
Fin: Año 1945

Antecedente:
La resistencia en Europa

(C) Virginia Tovar Martín



Comentario

La situación de Bulgaria era peculiar en 1940-1941: aliada del Eje, había declarado la guerra a Gran Bretaña y Estados Unidos, pero no a la URSS, y había enviado tropas para colaborar con aquél en la desmembración de Yugoslavia y Grecia. Sin embargo, Alemania había exigido siempre una mayor contribución y, en particular, la ruptura con la URSS, pese a las reticencias del rey Boris, de su Gobierno y de las fuerzas políticas.
Desde 1941, el partido comunista PCB -que ya en 1939 se había pronunciado contra la guerra y las anexiones de porciones de Yugoslavia y Grecia- había pasado a la resistencia contra el régimen y, más tarde, contra la presencia alemana. El PCB llevará a cabo acciones de propaganda y sabotaje, y en ellas se verán implicados altos mandos militares, que sufrirán represión como bolcheviques.

En 1942 se crea un Frente de la Patria, impulsado por el comunista G. Dimitrov, que reúne a antifascistas -comunistas, agrarios, socialdemócratas, nacionalistas, etc.- y que trata de forzar la salida de Bulgaria del Eje; lo mismo desean el Rey y la derecha monárquica, que entran en contacto con norteamericanos y británicos. Mientras, la red clandestina anti-Eje se extiende aceleradamente después de la derrota alemana en Stalingrado, en 1943. En septiembre surgen los primeros grupos armados, cuando, tras la muerte del Rey -agosto- presuntamente asesinado por los alemanes, el Gobierno prosigue su impopular política pro-Eje. A fines de año, los guerrilleros son unos 10.000, dirigidos por un Comité Nacional, en su mayoría procomunista.

Las victorias soviéticas en Ucrania, el prorrusismo popular, los bombardeos anglo-americanos de noviembre sobre Sofía, la propaganda de la resistencia y las presiones soviéticas deciden al Gobierno a salir de la guerra como sea posible, sobre todo a partir del momento en que los soviéticos han penetrado ya en Rumania y este país rompe con el Eje. El gobierno -2 de septiembre- declara la no beligerancia, con respecto a los aliados occidentales, pero no hacia la URSS.

Temiendo ser marginado, Stalin declara la guerra a Bulgaria -día 5-, que se apresura a pedir el armisticio -día 6- y a declarar la guerra a Alemania, aceptando la entrada del Ejército Rojo en el país. Inmediatamente, el Frente de la Patria iniciaba una campaña de huelgas y golpes de mano, como preludio a la insurrección popular del 9 de septiembre de 1944, cuando ya los soviéticos habían franqueado la frontera. Los partisanos ocupan Sofía, detienen al Gobierno e instauran uno de carácter provisional.