Comentario
Primitivo asentamiento de los pueblos vacceos, a mediados del siglo II a.C. conoció la llegada de los romanos, quienes aun tardarán mucho tiempo en dominar la región, pues sólo tras la caída de Numancia Palencia pasó a formar parte de la Hispania Citerior. Roma dio a la población el nombre de Pallantia y fue elevada al rango de capital de la comarca circundante. Sin embargo, aun fueron frecuentes las sublevaciones de la población, no totalmente pacificada, pues aun los palentinos se sublevaron contra Pompeyo y contra César.Bajo dominio romano, Palencia-Pallantia adquirió gran importancia a partir del siglo I, gracias fundamentalmente a las mejoras agrícolas introducidas por Roma.Palencia fue atacada por Teodorico II a mediados del siglo V, durante las invasiones bárbaras. El periodo visigodo deja en Palencia y su provincia importantes muestras, como la iglesia de San Juan de Baños, fundada por Recesvinto, o la cripta de la Catedral, dedicada a San Antolín.Como en ocasiones precedentes, una nueva conquista, esta vez árabe, supuso la destrucción de la ciudad. Junto a un territorio casi despoblado y de frontera, la ciudad fue conquistada por el rey Alfonso I, quien procedió a su reconstrucción. Con Alfonso II se suceden las luchas contra los musulmanes y se favorece el asentamiento de pobladores. Importante fue también para Palencia el reinado de Sancho el Mayor de Navarra, quien favoreció notablemente a la ciudad.Sin embargo el despegue definitivo no se produce sino hasta el siglo XI, favorecida por la restauración de su sede episcopal. Con ello, Palencia se benefició del hecho de etapa clave en el Camino de Santiago y la ciudad fue restaurada en su totalidad. En 1113 y 1124 tuvieron lugar en Palencia sendos concilios, con la asistencia de los reyes de Castilla. Durante el reinado de Alfonso VIII Palencia se encuentra en su mayor apogeo. Este monarca crea el primer concejo libre tras conceder a los vecinos un alcalde de hermandad e instituye, en 1209 y junto al obispo Tello Téllez de Meneses, el Estudio General, la que se considera primera universidad de España.Al desarrollo cultural le sigue el económico, promovido básicamente por la agricultura y la ganadería.