Comentario
Las particulares circunstancias de la historia medieval de España, con la presencia del Islam sobre el solar hispánico durante ocho siglos, desde la invasión musulmana en el año 711 hasta la reconquista cristiana de Granada en el año 1492, dejaron una profunda huella en la cultura española, que determinada corriente historiográfica ha minusvalorado sistemáticamente, a pesar de lo cual el eminente historiador Ramón Menéndez Pidal tuvo que definir a España en un conocido estudio como eslabón entre la Cristiandad y el Islam.
Durante estos ocho siglos España quedó dividida entre la Cristiandad y el Islam, dos culturas enfrentadas política y religiosamente. Pero el estudio de la historia militar y política de la Reconquista enmascara y oculta, con frecuencia, otra historia de enseñanzas más ricas, la de los contactos culturales entre cristianos y musulmanes. En un primer momento comunidades de cristianos (mozárabes) y de judíos vivirán como tributarios bajo dominio musulmán, época en la que numerosos cristianos se convertirán al Islam (muladíes). Pero después, cuando la balanza, política se inclina del lado cristiano con el progresivo avance de la reconquista serán los musulmanes vencidos (moros o mudéjares) y los judíos quienes vivan como súbditos de los reyes castellanos y aragoneses.
Es esta rica historia de civilización, de formas de vida y de cultura, que se desarrollan a ambos lados de las fronteras políticas, y que en períodos de paz establecen cordiales relaciones de vecindad y contactos culturales profundos, la que ahora nos interesa en primer lugar.