Época: Mesopotamia
Inicio: Año 1800 A. C.
Fin: Año 600 D.C.

Antecedente:
La religión asiria

(C) Alvaro Cruz García



Comentario

Los asirios tomaron buena parte de sus ideas religiosas de babilonios, quienes a su vez las habían recibido de sumerios y acadios. El panteón asirio era numeroso, pudiendo llegar hasta los 2.500 dioses, según una tablilla de Nínive. Las deidades eran tanto masculinas como femeninas y usualmente su aspecto era antropomorfo.
Los dioses asirios se agrupaban en tríadas y binas, a su vez subdivididas en numerosas familias, en las cuales cada individuo tenía sus propias características. El dios más importante era Assur, que ya aparece citado en las tablillas capadocias de Kanish. Con el paso del tiempo Assur fue elevado en él panteón asirio, convirtiéndose en una deidad de carácter nacional. Su prestigio fue de tal importancia que cuando se hizo la copia asiria del Poema de la Creación (o Enuma elish) en la época de Senaquerib, su nombre sustituyó al de Marduk, el dios central de tal poema.

Después de Assur se situaba la diosa Ishtar, probablemente su esposa, cuyo culto estuvo muy extendido. Diosa entre otras advocaciones de la guerra, se la adoró en templos como los de Araba-ilu (Arbelas), Kalhu, Nínive y, sobre todo, el de Assur, que compartía con su esposo. Aquí fue conocida con el epíteto de Assuritum (La asiria).

Marduk y su hijo Nabu, dioses babilonios, fueron incorporados con gran éxito al panteón asirio ya desde el siglo XIV, aunque en la época de Senaquerib la población reaccionó contra un culto que consideraba ajeno. Otros dioses muy venerados fueron Enlil, dios de las tierras; Ninurta, el hijo de Assur; Adad, dios del rayo y de la tormenta; Sin, el dios luna, señor de la sabiduría, el destino y los oráculos; Shamash, dios de la justicia, o Gula, diosa de los remedios.