Época: Grecia antigua
Inicio: Año 2800 A. C.
Fin: Año 146 D.C.

Antecedente:
El ejército en la Grecia antigua

(C) Alvaro Cruz García



Comentario

La estructura de las milicias en cada una de las poleis era diferente, pero sólo conocemos la organización de los ejércitos de Atenas y Esparta.
En Atenas, el reclutamiento del ejército estaba vinculado a la organización política y social de la polis. Un batallón de hoplitas era proporcionado por cada una de las diez tribus que configuraban la ciudad. Cada tribu elegía a su jefe, llamado taxiarcos, que a su vez elegía a los jefes de compañía, los locagos. De la misma manera se estructuraba la caballería, aportando cada una de las tribus cien jinetes, dirigidos por los filarcos. Los diez estrategos, elegidos por la Asamblea, eran los responsables del ejército. Los atenienses estaban obligados a cumplir un servicio militar, entre los 18 y los 20 años, denominado efebía. Los efebos estaban dirigidos por jefes elegidos por la ciudadanía, siendo sometidos a un intenso entrenamiento físico y a una exhaustiva preparación castrense que duraba un año, recibiendo en una ceremonia pública las armas identificativas del hoplita. Entre los 20 y los 60 años los ciudadanos atenienses debían estar disponibles ante una eventual movilización. Los estrategos eran los responsables del número de soldados que se debían incluir en las tropas, siendo elegidos directamente por los taxiarcos. Los ciudadanos entre 50 y 60 años sólo eran movilizables para defender el territorio patrio, junto a los efebos.

En Esparta, la ciudadanía llevaba la vida castrense en la sangre, preparándose para la guerra continuamente, incluso en tiempos de paz. Según la edad, los soldados de Esparta se distribuían en secciones, compañías y batallones. El batallón recibía el nombre de locai y estaba compuesto de 640 hombres dirigidos por el locago. Los dos reyes que conformaban la Diarquía eran los responsables del ejército en un primer momento, pero después de las reformas institucionales espartanas sólo uno de los monarcas ejercía la dirección del ejército, ayudado por los polemarcos, los jefes de los cuerpos. Los ciudadanos espartanos conformaban el núcleo castrense, la infantería pesada; a su lado también participaban ingenieros militares que eran reclutados entre los periecos, las tropas ligeras -siempre dirigidas por oficiales espartanos ya que estaban constituidas por periecos- y los servicios de intendencia. Hasta comienzos del siglo IV a.C. los hoplitas de Esparta fueron la primera potencia militar de la Hélade, entrenados para vencer o morir en la batalla. No en balde, cuando las madres despedían a sus hijos que iban a la guerra les emplazaban a regresar con su escudo o sobre él.