Época: Final franquismo
Inicio: Año 1957
Fin: Año 1975

Antecedente:
El final del franquismo
Siguientes:
Vieja y nueva oposición
Oposición y movimientos sociales
La oposición nacionalista
Auge y renovación del antifranquismo

(C) Abdón Mateos y Alvaro Soto



Comentario

Al comenzar los años cincuenta, la oposición al régimen de Franco, protagonizada por los supervivientes del exilio y de la represión de la posguerra, vio cómo se agotaban sus estrategias de lucha. Y esto ocurría tanto con la resistencia guerrillera como con la creación de plataformas unitarias que atendieran a la evolución de la coyuntura internacional. Mientras todavía en 1949 observadores extranjeros como Gerald Brenan encontraban, al viajar por España, un ambiente de hosquedad y de antifranquismo colectivo no sólo entre los vencidos sino entre parte de los vencedores, hacia 1962, en cambio, otros viajeros como Rossana Rossanda, creían observar una sociedad anómica, silenciada y alejada de la esfera de la política. Y, sin embargo, poco después, intelectuales exiliados como Francisco Ayala, Juan Goytisolo o Max Aub, constataban la emergencia de una nueva sociedad que cada vez tenía que ver menos con las consecuencias de la Guerra Civil y entraba por la senda del consumo de masas.
Estos testimonios literarios del ambiente en la España de los años cincuenta y primeros sesenta resumen perfectamente la realidad social con que tuvo que enfrentarse la oposición democrática. Durante este período de apogeo del poder de Franco, la repercusión de las actividades antifranquistas sobre la estabilidad de la dictadura fue mucho más reducida que durante la década de los cuarenta o de la que habría de alcanzar a partir de 1970. No obstante, la oposición mantuvo el papel de ejemplo moral y, además, desde 1956, se inició la prehistoria de lo que habría de ser el sistema de partidos existente con la restauración de la democracia. Por otro lado, la transformación de la sociedad española permitió el surgimiento de la protesta de movimientos sociales que, con el tiempo, alimentaría de nuevo las maltrechas filas de la oposición.