Época: Intermedia-Sud
Inicio: Año 30000 A. C.
Fin: Año 3000 D.C.

Antecedente:
Las tierras bajas de América del Sur
Siguientes:
3000-2000 a. C.
2000-1000 a. C.
1000-0 d. C.
0-500 d. C.
500-1000 d. C.
1000-1500 d. C.



Comentario

Además de las fechas antiguas que hacen referencia a las Tocas amazónicas, que documentan la existencia del hombre antiguo en la región hacia el 30.000 a.C., se ha detectado la presencia continuada de pobladores desde el quinto milenio en que se distribuyeron diversas comunidades por la costa, distinguiéndose dos tradiciones en Brasil meridional: una, portadora de puntas de proyectil, y otra que carecía de ellas. Esta última, Humaitá, está representada por numerosos sitios bien forestados a lo largo de ríos, lagunas y pantanos donde, en función de los complejos de instrumentos y del patrón de asentamiento, se pueden distinguir tres subtradiciones:
1. Tamanduá, caracterizada por un utensilio bifaz en forma de boomerang, acompañado por guijarros uni o bifaciales, raederas y cuchillos. La tradición se centra sobre el río Uruguay, y es conocida en Argentina como Altoparanaense.

2. Ivaí está relacionada con ella y se desarrolla en el norte y oeste del Paraná, comprendiendo raederas, guijarros unifacíales y martillos.

3. Antas aparece al sur de Rio Grande do Sul, con una tendencia a colocarse en emplazamientos elevados, distinguiéndose por guijarros unifaciales, cuchillos e instrumentos de percusión. Los asentamientos naturales son los abrigos rocosos, aunque también existen campamentos al aire libre.

Hacia el 4.000 a.C. se hacen populares en las costas de Venezuela y sur de Brasil los concheros con una orientación hacia la recolección de los recursos marinos. Los estudios geológicos señalan que entre el 4.000 y el 3.000 a.C. el mar tuvo una altura de 2,5 m. superior a la existente hoy día, cubriendo amplias extensiones de tierras bajas, y originando muchas situaciones de mangroves muy aptas para la recolección de moluscos. Quizás se pueda dar la misma explicación a los concheros de Cuba y la Hispaniola para el 3.000 a. C.

Hacia el final de este periodo aparece la cerámica en los concheros de la costa del Pará. Tiene desgrasante de concha, con formas muy simples y carente de decoración, y sirve para definir la fase Mina. Hay dos explicaciones posibles a la aparición de una cerámica tan temprana: la invención independiente desde los morteros de piedra; o la introducción desde otros sitios de América. Los arqueólogos se inclinan por esta segunda explicación, quizás desde las costas de la Guyana, donde se desarrolla una cerámica similar relacionada también con la ocupación en concheros.